jueves, 6 de febrero de 2014

Confía en el Poder que reside en ti



Muchos de nosotros vivimos la vida desde el paradigma del control, nos la pasamos pensando compulsivamente sobre todo tipo de asuntos y temas de nuestra cotidianidad, queriendo, por así decir, controlar los diferentes asuntos de nuestra vida para tener los resultados deseados y poder estar en paz. Si bien esto, en si mismo no es algo malo, todos sabemos el resultado, estrés. Pensamos que la paz es algo que conseguiremos al arreglar todo allá afuera. Los sabios del yoga nos hablan de que hay otra forma de vivir la vida, y es prestando atención no tanto a arreglar el mundo, sino mas bien, a como me estoy viviendo el mundo, traer la atención a nosotros mismo en nuestro devenir.  Al hacer esto, una de las primeras cosas que nos damos cuenta es lo “compulsivo” de nuestro pensar asociado a un sin numero de emociones asociadas y no reconocidas sino mas bien reprimidas, como por ejemplo, el miedo. Y es que a menudo, lo que esta detrás de este pensar compulsivo es una emocion muy asociada al control, miedo, y su origen en creencias donde nos desvalidamos a nosotros mismos como, “tengo que pensar todo el tiempo para poder manejar todo en mi vida”, “no me voy acordar”, “algo se me va a escapar”, “algo en mi es defectuoso”, “no puedo confiar en mi juicio”, esta sutil desconfianza en nosotros mismos se manifiesta de muchas formas y crea una realidad donde las emociones predominantes son la angustia y la ansiedad y bajo la influencia de estas emociones, nuestra actuar se vuelve torpe, compulsivo, caótico, repetitivo y poco efectivo. Lo que los maestros de yoga nos dicen es,

1.     aprende a tomarte instantes donde observas, sientes, validas y aceptas las emociones y pensamientos que pululan tu mundo interior,
2.     Luego presta atención a la presencia silente que subyace a estos, ese observador interior que esta siempre presente en toda experiencia y esta consciente del contenido de la mente, mas trasciende este contenido. Pon tu atención en sentir que eres esta energía consciente que subyace a tus creaciones mentales, ya que allí, hay una gran paz y confianza 

Al hacer esto de manera habitual, como por ejemplo en la practica de meditación, crece en ti una experiencia de espacio y bienestar interior. Cuando aprendes a estar mas en contacto con esta silente presencia interior, estas mas presente, atento, y te permite encargarte de la vida desde un espacio de confianza en ti mismo y profunda creatividad, para responder sabiamente a lo que te va trayendo la vida momento a momento.

Esto no quiere decir, que no te das tiempo para reflexionar, planear y solucionar situaciones que surgen en tu cotidianidad, quiere decir, que empiezas a cultivar mas instantes  de silencio, donde decides simplemente ser y estar, es en estos espacios, es donde puedes ver con mas claridad lo que ocurre en ti, (emociones, preocupaciones, etc,) elegir soltar aquello en lo que andas pensando compulsivamente e innecesariamente y traer tu atención al simple hecho de ser el espacio donde ocurre este drama.


Cada vez que te permites darte un instante de auto-observación gentil, soltar el drama o dialogo interior y sentir la sencilla experiencia de ser y existir, creces en conexión con el Poder que subyace a las creaciones mentales, y por ende creces en bienestar, lucidez y auto-confianza, que son cualidades de tu propio Ser eterno. Al hacer este habito parte de tu vida, te descubres siendo una persona mas presente, ecuánime y capaz de tomar decisiones acertadas, creces en autoconfianza.

domingo, 2 de febrero de 2014

El mar del verdadero Ser

La persona que crees ser, es sólo una ola que emerge y subyace en el mar del verdadero Ser. No te apegues a esta, ni la rechaces, sólo reconócela por lo que es, hermosa y efímera. Lo que te abre a la experiencia del vasto mar del Ser es tu capacidad de abrirte al amor y dejar que este amor derrita tu coraza de miedo. Este es el proceso de la meditacion. 



viernes, 31 de enero de 2014

Reflexiones sobre la Paciencia



La Paciencia es apertura al Momento Presente
La paciencia es una manera de relacionarnos con el momento presente, donde podemos abrirnos plenamente a lo que nos esta ofreciendo, así no sea lo que esperábamos.

La Paciencia es aceptar lo que es
Entender que la vida no necesariamente va a responder a nuestras expectativas, la vida, no responde a las expectativas de nadie, esta es simplemente lo que es, y ser paciente es aceptar esta realidad.

La paciencia es parte de saber bailar con la incertidumbre de la vida
Aquello que estamos esperando que ocurra lleva un proceso, y todo proceso, nos confronta con la incertidumbre de su culminación, ocurrirá, cuando, como, donde? No esta bajo nuestro control. Si queremos que algo ocurra, tenemos que bailar diestramente con los diferentes factores involucrados, y todo baile lleva un ritmo, no solo el nuestro, el ritmo de los diferentes factores.

La paciencia viene con amar el proceso tanto como la meta
Habiendo expuesto lo anterior, la paciencia es la capacidad de apreciar el proceso de "hacer" tanto como el proceso de "lograr". Apreciar el baile, apreciar el camino, entender que la dicha de la vida esta en "hacer", mas que en "lograr", ya que el logro, es efímero, elusivo, e incierto.

La paciencia es soltar la ilusión de control, al mismo tiempo que creas las condiciones para que lo que quieres pueda ocurrir


Al meditar aprende a apreciar el proceso al igual que el logro, aprende a disfrutar el proceso de explorar, reconocer y soltar lo que emerge en tu mundo interior, de esta manera, te liberas de la tensión puesta en conseguir una mente serena, y es que para conseguirla tienes que cultivar la paciencia capaz de apreciar la mente agitada.

Aprende a valorar cada pequeña conquista, es decir, puede que a menudo no logres la meta esperada, pero puedes apreciar el esfuerzo, destreza y sabiduría que has adquirido en el proceso de buscar lograrla. Esto nos son efímeros, estos se quedan como parte de tu personalidad y son los requisitos esenciales para que algún día quizás puedas lograr lo que quieres.

Somos pacientes no solo para conseguir algo en el futuro, sino mas importante aun, para apreciar y por ende disfrutar de lo que nos ofrece el presente.